Entrevista Memoria de la Transición.

Nuestra entrevista se la hemos realizado a Araceli Chinea Delgado, una mujer de 47 años nacida en el sur de Tenerife y que muy amablemente nos ha concedido esta entrevista.

Nosotras: Hola, ¿que tal está Araceli? ¿Preparada para nuestra entrevista?

Araceli: Hola, muy bien y con ganas de compartir con ustedes los recuerdos de mi infancia.

Nosotras: Podemos comenzar hablando de la educación en ese entonces, ¿Cómo era la escuela?

Araceli: Los colegios eran mixtos y las clases estaban distribuidas por edades, las chicas se sentaban con las chicas y los chicos con los chicos, no nos dejaban que nos mezclásemos y tampoco nos mezclábamos nosotros, era mixto pero había reglas.

Los profesores de mi época eran muy estrictos, si fallabas en alguna tarea o respuestas en clases te arrestaban o bien te ponían de rodillas con libros pesados en las manos o nos daban con reglas en las manos, incluso recuerdo una vez que a mi un profesor me dio un patada porque no hice un ejercicio bien en la pizarra. No podíamos reclamar porque si lo contábamos en casa los padres nos castigaban igual.

Recuerdo que teníamos una profesora que todos odiábamos que tenia un anillo con una piedra enorme y cuando pasaba por nuestro lado y veía que teníamos algo mal nos daba con el anillo en la cabeza.

Los recreos era lo más que nos gustaba, porque cuando salíamos teníamos la botella de leche con el Cola Cao que nos traía un señor cada día y el bocadillo que nos preparaban nuestras madres o algunas galletas.

Teníamos uniforme y era horrible, los chicos con peto de pierna corta azul marino y camisa blanca y las chicas con peto de falda azul marino también y camisa blanca, para distinguirnos de quien era una chica y quien un chico.

Los libros pasaban de hermano a hermano o de primo a primo, no los comprábamos y los teníamos que cuidar bien para el próximo que le tocara, sin rayones, ni roturas.

Nosotras: Y en tu tiempo libre, Araceli, ¿qué solías hacer?

Araceli: No tenia mucho tiempo libre, casi ni veía la televisión, recuerdo muy poco de lo que pasaban por ella, siempre estaba ayudando a mis padres a atender los animales y las huertas.

El ratito que tenia libre iba con mis primas a jugar a las casitas con muñecas de trapo que nos hacia mi madre.

Nosotras: Casi no veías la televisión, pero, ¿recuerdas el intento de golpe de estado de Tejero?

Araceli: Si me acuerdo de verlo por la televisión pero era pequeña y no nos dejaban ver mucho la TV, lo poco que supe fue con las conversaciones de los mayores, mis abuelos, mis padres…a los niños nos tenían al margen de todos los temas de política, por lo menos en mi casa era así, por eso digo yo que la época nuestra era más sana o más feliz porque a penas nos enterábamos de nada, cuando eres niño se vive mas feliz en la ignorancia.

Ni en el colegio, que yo me acuerde, los profesores hablaban de política, también tengo que decir que yo dejé el colegio pronto, a lo mejor eso cambió.

Nosotras: Y la música de la época, ¿cómo era? ¿Qué música solías escuchar tú?

Araceli: Me acuerdo que había grupos, por ejemplo uno de ellos era Parchís, otro era Mocedades, los Pecos, Abba. También había solistas, mi cantante preferido en esa época era Camilo Sesto, todavía tengo cintas de él y discos de vinilo.

Nosotras: ¿Cómo era la ropa de tu época, Araceli?

Araceli: Las mujeres siempre iban con vestidos, no usaban pantalones, mi madre empezó a usar pantalones cuando ya fue más mayor, cuando empezó la moda de que las mujeres podían usar pantalones.

Los hombres vestían con pantalón de pinza, nada de vaqueros ni chándal y camisas de botones de manga larga o corta. Recuerdo que mi padre también usaba sombrero y que la mayoría d los hombres tenían bigote.

Nosotros los niños nos vestíamos con las ropas que nos hacían las madres o las costureras del pueblo, muy pocas veces nos compraban ropa a mis hermanos y a mi, cuando ya crecíamos nos compraban algo pero muy de vez en cuando.

No había muchas modas, yo empecé a vivir la moda a partir de los 16 o 17 años, recuerdo que mi hermana mayor usaba minifaldas o pantalón d campana. Yo, cuando ya fui adolescente, empecé a utilizar vaqueros, camisas y mis tenis Adidas.

Nosotras: Y a parte de la ropa, ¿cómo era la alimentación? ¿Tú cómo la viviste?

Araceli: En esa época muchas personas pasaban hambre, pero en mi caso no nos faltaba de nada porque mi padre era agricultor y cultivaba verduras y frutas, tenía todos los animales que se pudiesen, desde la vaca hasta la gallina.

Recuerdo que mi padre hacia su propio vino, mis hermanos y yo lo ayudábamos a exprimir las uvas, también hacíamos nuestro propio queso con la leche de las cabras y las ovejas.

Lo único que echábamos en falta era alguna golosina y la Coca-Cola, porque mis padres no nos la compraban porque decían que eso era malo para nosotros.

Cuando mi madre nos freía papas lo hacia con manteca que sacaba de los cochinos cuando los mataban porque el aceite en ese entonces era muy cara. Y cuando mi padre mataba un cochino, mis hermanos se peleaban por la vejiga del orín para hacer los balones para jugar al futbol.

Nosotras: ¿Recuerdas los primeros coches que había en la época?

Araceli: Los coches los utilizaba la gente que tenía dinero, los de clase media/alta. Recuerdo que aquí en el sur había un taxi que utilizamos cuando había alguna urgencia, por ejemplo cuando alguna mujer se ponía de parto. El taxi era negro y había que llamarlo para que viniese a tu casa, en mi caso, en casa no teníamos teléfono y teníamos que ir a la casa de una vecina para poder llamar. Mi padre no utilizaba coche, su transporte eran los caballos, recuerdo que cuando se compró un coche éramos todos mis hermanos ya mayores.

Y mi primer coche fue el de mi marido, un Fiat Punto gris.

Nosotras: La religión en esa época, ¿era muy estricta? ¿qué es lo que recuerdas?

Araceli: Sí, nuestros padres nos hacían ir todos los domingos a misa porque ellos eran muy católicos e incluso después de la muerte de Franco todavía fue así. También recuerdo que en el colegio antes de empezar con las clases teníamos que levantarnos de nuestras sillas y rezar el “Padre Nuestro”. Había imágenes de Cristo en todas las clases y también en las casas.

Lo de ir a misa los domingos cambió según fuimos creciendo y también porque la sociedad fue cambiando.

Nosotras: Entonces, si la religión todavía era estricta, ¿estaba mal visto ser divorciado? ¿Y las viudas cómo eran tratadas?

Araceli: La gente se divorciaba pero estaba mal visto, te miraban mal si sabían que eras divorciado, tus padres no te dejaban que te divorciaras porque para ellos era una ofensa para la familia.

Las viudas tenían que quedarse solas y sí tenían alguna pareja tenia que ser a escondidas porque si se enteraban ya la miraban mal y la criticaban por no respetarle el luto al marido.

Nosotras: Ya por último, ¿qué es lo que mejor recuerda de su época de juventud? Y, ¿cuál es su opinión de aquella época?

Araceli: Mi mejor recuerdo de aquella época es cuando vivíamos todos juntos, con mis ocho hermanos y mis padres.

En mi opinión es que en aquella época, vivíamos más tranquilos, no como ahora con tanto estrés y la gente era menos materialista, nos ayudábamos unos a otros sin pedir nada, sólo si necesitaba ayuda otro se le prestaba y punto. Ahora todo ha cambiado y la gente es más individualista, pero no quiere decir que sea tan mala la sociedad de ahora.

Nosotras: Pues, muchas gracias por su tiempo y que tengo un feliz día.

Araceli: Igualmente, fue un placer contar las experiencias de mi época, quisiera haber contado un poco más, pero mi memoria con mis 47 años ya, está fallando.

Entrevista realizada por Laura Quero y Tamara Chinea de 2º Bach “B”