Vicenta Santos Medel nació en el año 1965, en Agulo (La Gomera). Allí vivió gran parte de su infancia, concretamente hasta los 20 años, cuando partio hacia Tenerife.
Entrevistador: ¿ Qué diferencias notastes entre el período de gobierno franquista y la llegada a la monarquía de Juan Carlos I?
Vicenta Santos: La principal diferencia que yo personalmente note fue que en la época de Franco no había tanta libertad como cuando llego Juan Carlos. Por ejemplo, las mujeres en esa etapa eran más domesticas, se encargaban de mantener la casa y el campo, mientras que el hombre era quién salia a trabajar para conseguir el sueldo de la familia.
Entrevistador: ¿Cómo se recibió la llegada de Juan Carlos I como rey de España?
Vicenta Santos: Pues para mejor, nos beneficiamos la gran mayoría porque antes, durante la dictadura, las leyes eran mucho más duras y tenías que cumplirlas por obligación. Gracias a la llegada de Juan Carlos se impusieron más ayudas económicas en cuanto a la medicina y a los estudios. Por ejemplo, la sanidad cobro un efecto muy favorable, al igual que los medios de transportes, que fueron más frecuentes y que eran muy necessarias para transportarte de un sitio a otro. En cuanto al tema laboral, se aumentaron puestos de trabajopor igual (tanto para el hombre como para la mujer), y era menos forzosa la mano de obra debido a que se introdujo más maquinaria como por ejemplo las palas, pica-picas, grúas y más elementos que ayudaron a la reforma sobre todo de las vías de transporte como las carreteras y los tranvías.
Entrevistador: ¿Cómo les afecto la época franquista a tus padres?
Vicenta Santos: En aquella época el trabajo para mis padres era bastante escaso porque era una época de crisis laboral y ecónomica en comparación con la actualidad. Principalmente se trabajaba cosechando los distintos productos en el campo para el consumo propio. Por otro lado, en cuánto al tema educativo, había muchos analfabetos que no podían acceder a las escuelas porque se miraba más a dedicar el tiempo en las tareas laborales del campo por la necesidad de sobrevivir y debido a que no tenian recursos para comprar el material necesario para estudiar.
Entrevistador: ¿Te parece que a España le viene mejor el sistema democrático aceptada después de la Transición en la que se vive ahora con Juan Carlos I que una dictadura como la de Franco?
Vicenta Santos: Sí, porque yo creo que los ciudadanos tienen el derecho fundamental de poder votar en las elecciones a los representantes al gobierno que se crean más convenientes para la determinada igualdad y libertad para todos en cada momento. La dictadura de Franco te quitaba el derecho de libertad y el de poder participar en la política de tu propio país y sinceramente no estaba de acuerdo con las leyes que se establecieron en esa época porque era una persona un poco machista y conflictiva, debido a que buscaba alianzas con países internacionales para defenderse de posibles guerras.
Entrevistador: ¿Podías explotar los recursos naturales y utilizarlos de una forma libre en la época franquista, tal y como se permite con Juan Carlos I como rey?
Vicenta Santos:No, en la época de Franco no podías aprovecharte mucho de los medios que te daba la naturaleza. Por ejemplo, si se iba al bosque a cortar leña, hallas y brezos para utilizarlos para el abono de las tierras, podían multarte económicamente por cortar esos arbustos debido a que esas zonas estaban protegidas por guardabosques, que en la actualidad no predominan tanto en el control de la naturaleza, tan extrictamente, como en aquella época.
Entrevistador: ¿La Transición la viviste como una etapa dramática debido a las guerras políticas internas?
Vicenta Santos: Yo personalmente no llegue a tener ese miedo por saber quién iba a gobernar debido a que tenía muy poca edad ( apenas 10 años), y no era conciente de las distintas batallas políticas que ocurrieron para elegir al Monarca encargado en dirigir el país. Pero por un lado, estoy agradecida por haber sido Juan Carlos el hombre elegido para controlar el sistema político y ejecutivo del país. Es una persona que tiene pocos conflictos, mucha honestidad y buenas relaciones con los ciudadanos del país, incluso con países extranjeros. Sin duda, gracias a él hoy tenemos libertad de opinión y actuación.
Entrevista a Elisa Rodríguez, natural de La Palma, de 91 años y su hija Julia Cabello de 66 años, jubilada como trabajadora social.
Madre e hija, nos cuentan su historia....
Elisa Rodríguez
-¿Cuéntanos que te acuerdas de la guerra civil?
Pues la guerra empezó nación con nación unos estaban de parte de Franco y otros de parte de la Republica. Yo me case el 8 de julio y la guerra empezó el 18.
- ¿Entonces viviste la guerra de España?
Si, la viví y a mi marido que en paz descanse se lo llevaron y se pasó toda la guerra en el frente. El estaba medido para entrar al cuartel cuando empezó la guerra, a todos los que estaban medidos, a todos esos los llevaron para la guerra, para el frente, todo lo que es la parte norte de España, de las raíces, y entonces él movilizó a mucha gente y otros estaban con los rojos pero él fue con los soldados, hubo incluso apoyo de los italianos y por lo tanto se fue posicionando hasta que al fin ganó la guerra y se quedó. Sí… vivimos muchos años gobernados por Franco.
La vida era buena en el franquismo, pero murió mucha gente. Ya después de la transición no me acuerdo muy bien, solo sé que quizás en la transición de cierto modo si habían cosas mejores y otras que no. Franco tenia la gente más restringida en cambio Juan Carlos dio más libertad, quizás más de la cuenta.
-¿Qué recuerdas de la transición?
Me acuerdo, que antes de morir franco empezó Juan Carlos al que nombró el mismo Franco y ya después cuando murió, Juan Carlos fue nombrado rey de España, entonces empezó la transición y hasta la fecha. De eso no hace muchos años, pero yo hay cosas que ya no recuerdo muy bien, hay una etapa de la vida que yo la tengo medio borrada ya, no sé, por los años tal vez, por qué mas va a ser –risas–…
Julia Cabello
-¿Cómo se vivió la situación respecto al cambio constitucional?
Había mucha expectativa por los cambios que se iban a producir, era además una expectativa vivida con mucha ilusión.
-¿Qué información tienes sobre la elaboración del anteproyecto y finalmente el proyecto de la constitución?
Bueno, respecto a la formación de la ponencia se que fueron varias personas encargadas de esa elaboración, también sé que el mismo rey llamó personalmente a un profesor de la Universidad de La Laguna para que formara parte del equipo de los concejeros a redactar la constitución, creo que era González - no recuerdo su nombre-. Era un profesor de la universidad y el rey quería que representase a Canarias.
-En las elecciones del 15 junio de 1977. ¿Votaste?
Si. Yo siempre he votado, desde que me han dado la oportunidad siempre he votado
-Las primeras elecciones democráticas ¿como las vivió el pueblo español?
Esas elecciones especialmente fueron vividas con una ilusión tremenda. No me acuerdo el índice de participación, de hecho, un cuñado mío se presento en las elecciones por el partido de la UCD. Está claro que Adolfo Suarez tuvo algunos aciertos en su mandato y uno de ellos fue el reconocimiento del Partido Comunista y reconocer a los de Izquierda Republicana. El reconocimiento de los dos partidos y de muchos más como también la elaboración de una constitución en donde cupiéramos todos fueron sus mejores aciertos. No obstante todos no lo vieron con los mismos ojos.
-¿Cuál es el recuerdo más importante que has tenido de este periodo y que pueda por tanto describirlo?
El recuerdo que puede describir este periodo fue como se prolongo la agonía de franco. La cara de cuando Arias Navarro –actual presidente entonces- dio la noticia de algo que se estaba esperando y que muchos ansiaban. Esta noticia fue dada como si hubiese sido la mayor tragedia del mundo y de eso nada… se trataba de una persona que tenía ya un pie en el otro lado desde hacía mucho rato.
-¿Qué recuerdas del 23 F y Tejero?
Eso ya fue otra cosa, era una situación sumamente difícil porque había todavía una historia de resentimiento muy próxima. Era difícil casar todos los deseos de todos los grupos y sobre todo, que había unos militares que se creían que podían seguir “a su aire “y entonces pues había mucha gente disconforme en el sentido de que a lo mejor habían vivido muchos privilegios en el gobierno anterior y que ahora no estaban dispuestos a compartir con todos aquellos que supuestamente para ellos eran “enemigos” y fue por tanto cuando Adolfo Suarez dimitió por que observo que había una situación muy difícil. Fue como un teatro, algo que convulsionó totalmente, ahí se volvió a sentir el miedo, yo creo que lo quisieron hacer para resolver y lo que consiguieron fue asegurar aún más la democracia porque la gente se dio cuenta que no querían volver y que la democracia estaba todavía pendiente de un hilo.
-El papel de la mujer en la transición. ¿Cómo se desarrollaba?
En esta etapa el papel de la mujer estaba un poco difícil – suspiro- , sin embargo, yo puedo hablar de mi experiencia: yo pude estudiar, trabajé, pude conseguir un trabajo referido a mi área , también tiene que ver que trabaje en la administración pública que es diferente a la mayoría de las mujeres sin embargo el enfoque y el predominio del hombre sobre la mujer por ejemplo: para el ámbito de la cartilla de la seguridad social : el padre tenía que firmar una autorización para que mis hijos estuviesen en mi cartilla y declarar que él no tenían ningún ingreso. Esa opción que hay ahora de que pudiera tenerlo uno u otro no existía.
-¿El acceso a los trabajos estaba condicionado por algo?
Si, de hecho, para entrar en los trabajos había que firmar un documento donde se era fiel y te comprometías a cumplir los principios del movimiento del franquismo -suspiro- y todas estas cosas se admitían ya que este era el sistema en el que uno se tenía que mover y aunque no estuvieses de acuerdo con todo tenias que aceptarlo más que todo para conseguir un trabajo y punto. Y para realizar una oposición te decían: si no tienes padrinos no te van a confirmar y esa filosofía y creencias son muy difíciles de erradicar.
-¿Cuéntanos algún ejemplo de falta de democracia?
Bueno, en ese momento había mucho amiguismo en los estamentos como ya he dicho anteriormente pero sí, un ejemplo muy claro que yo viví fue cuando estaba embarazada, yo entendía y sabía que podía dar a la luz por el hospital (seguridad social) y también me correspondía por vivir cerca, etc. Mi medico decía que el me derivaba a la residencia y yo le dije que no, que yo prefería el hospital , total que tuve que llegar a la propia inspección de la seguridad social para que me dijeran que la maternidad se consideraba como un derecho de urgencia y que por lo tanto estaba en mi derecho de ir al hospital, y aun así tuvieron que llamar a la secretaria y decirle que mirase el articulo correspondiente para que me dieran el ingreso (otra persona sé que no hubiese llegado tan lejos) pero es que así funcionaban las cosas.
-¿Y en Canarias como se vivió esta situación? ¿Más acentuada o menos?
Yo creo que en Canarias se vivió más acentuada porque al estar en la periferia, resulta que para entrar en la instituciones nacionales , primero las oposiciones se hacían en la península, no accedían canarios porque tenias que estar un mes presentando exámenes y no es común que alguien que esté buscando trabajo pueda acceder a esos costes. Y también en esa época se castigaba a un funcionario a ocupar un puesto de canarias. Entonces imagínense como podía ser la tarea cara al público de estas personas y cuando tu intentabas acceder a algunos funcionarios retrogradas no entendían que uno informase a la gente de sus derechos... eso si trajo la democracia por lo menos que la información llegase a todo el mundo, nació el mutualismo laboral, que fue otra entidad al lado de la INP y en el 1987 nace lo que es el Instituto de Servicios Sociales y el Instituto de la Seguridad Laboral.
-¿El Servicio militar fue obligatorio para los hombres hasta que momento?
Durante el franquismo fue obligatorio, durante la transición también fue obligatorio y hasta hace poco, más o menos hace veinte años que ha dejado de ser obligatorio.
-¿Y las mujeres tenían que cumplir algún servicio?
Si en mi tiempo de juventud teníamos que hacer el servicio social, y era una prestación que había instituido la Falange y era una formación para las mujeres así como los hombres cumplían el servicio militar, este servicio social se hacía a partir de los 16 años, una parte era formativa muy instructiva, y para desempeñar un puesto en la administración tenias que haber hecho el servicio social, entonces la que estudiaban magisterio tenían que hacerlo, duraba un mes. ¿Y de que iba? Pues principalmente formación en todos las actividades propias de la mujer, conocer los movimientos, la Falange hasta cosas como manejar una granja.
-¿Te imponían entonces la ideología?
Bueno pero el conocimiento era muy general, de hecho, el mejor libro que yo tengo de cocina es el de la Sección Femenina de Falange (tuvimos el honor de verlo) es la 19 edición, te da cosas que no han perdido actualidad: empanar, escaldar, estofar etc. Este lo compre en el 1970 –cuando me case- y después de esto se sigue editando. También tiene mucho que ver con el papel de la mujer (tareas del hogar).
-¿Y las mujeres cómo se desarrollaban en el ámbito laboral?
Bueno, las mujeres no estudiaban solo hacían cultura general, cuando yo me apunte al colegio al bachillerato, había todo un tropel de niñas bien, esas niñas iban a cultura general, estudiar era como para hacer una carrera y de eso nada, ella iban a cultura general aprendían un poco de todo: presentarse y esas cosas para después conseguirse un novio.
-¿Y el acceso a los estudios?
Pues estos eran muy caros, de hecho no podía acceder cualquier persona, los colegios eran privados algún que otro instituto habían en las grandes ciudades, por lo tanto, lo que realmente encarecía los estudios era el trasporte y para eso no había ninguna ayuda. Había becas sí, pero no de oportunidad igualitaria, tenias que tener algo (propiedad) para que te la concedieran. Pero esto ha cambiado menos mal. Cuando estudió mi hermano medicina tuvo que ir a Granada, aquí no había medicina en Tenerife y habían otras muchas carreras que no habían. Y te suponía ser un hijo de papa, que tu padre currara y te lo pudiera pagar -risa- . Pero eso era en lo que más se notaba en los estudios y en los derechos sociales.
•"Eso si trajo la democracia por lo menos que la información llegase a todo el mundo [...] algunos no entendían que uno informase a la gente de sus derechos..."
A continuación se encuentra un video realizado por nosotras donde narra parte de la entrevista espero que les guste..
http://www.youtube.com/watch?v=gFXS7MdAUn0
Realizado por: Estefanía Cedeño González 2º Bach A
Rosangela Lino González 2º Bach C
-Nombre y apellidos del entrevistado: Tomás Martín Bethencourt. -Edad: 73 años. -Lugar de nacimiento: Puerto de la Cruz. -Vive en: Puerto de la Cruz, Santa Cruz de Tenerife. -Fecha de nacimiento: 02.06.1937 -Estado: Casado. -Situación actual: Pensionista-jubilado. -Relación con la entrevistadora: Abuelo-nieta.
A continuación, voy a realizar la entrevista a Don Tomás Martín Bethencourt, de 73 años de edad, con el objetivo de saber sus experiencias y recuerdos comprendidos en el periodo entre 1870 a 1880, incluyendo así, el proceso que conlleva la Transición Democrática.
Naira: Hola Tomás, quería saber si me responderías a algunas preguntas sobre los años setenta y ochenta, porque estamos haciendo un trabajo para la asignatura de historia. Me gustaría que me responderías a la siguiente pregunta: ¿Qué significó para ti la muerte de Franco?
Tomás: Bueno… yo me crié cuando Franco cogió el poder de España y estuve como 30 años con el régimen de Franco. No conocías otra cosa y en el mismo colegio donde yo estaba (colegio de curas: Los Salesianos) siempre nombraban a Franco y en la calle también se hablaba mucho de él. Cuando murió, no sentí ni alegría ni pena, sí que sentí algo porque aunque no era muy bueno, a lo largo del tiempo se le cogía un siento aprecio pero tampoco gran cosa.
Naira: ¿Qué vez más conveniente, la España de Franco o la actual democracia de Juan Carlos I?
Tomás: Las dos cosas son bastantes diferentes, porque son diferentes. Lo que estaba con Franco era una dictadura, era una dictadura como la de Fidel Castro por lo que era un régimen fuerte, y ya la democracia tenía otras normas y surgieron varios partidos. Con la dictadura España no tenía comercio, pero hoy si tiene, por lo que es mejor la democracia que la dictadura, claro.
Naira: ¿Cómo recuerdas el 23F?
Tomás: Nosotros estábamos en Los Realejos, me acuerdo porque fue una cosa muy fuerte y salía en todas las televisiones. Fue en el Congreso de los Diputados fueron asaltados todos los congresistas. Cuando pasó el 23F estaba Adolfo Suárez como Presidente del Gobierno, fue como un gesto de como apropiarse del estado, fue un golpe de estado que no salió bien y fracasó, pero la verdad es que pudo haber sido más serio.
Naira: ¿Cómo recuerdas la Presidencia del Gobierno?
Tomás: Recuerdo a Adolfo Suárez como Presidente del Gobierno, pero antes de él estuvo Calvo Sotelo pero no duró mucho y fue después de las votaciones cuando salió elegido el segundo Presidente, Adolfo Suarez. Después fue Felipe González, y ahora sigue el que está ahora que es Zapatero.
Naira: ¿Cómo era la situación económica por aquel entonces?
Tomás: Era mala, no había trabajo, no había dinero, y no mejoraron las cosas hasta que no se recuperó años más tarde.
Naira: ¿Cómo era la sanidad en general?
Tomás: Cuando yo era chico no había seguridad social, los médicos iban a las casas, no habían tantos como hoy. Antes a los médicos que iban a las casas se les llamaba médicos de cabecera, te visitaban a tu casa o ibas a las consultas que tenían ellos. Yo tuve un medico cuando tenía 9 o 10 años que iba a mi casa porque tuve la fiebre tifoidea. Tuve la fiebre por bañarme en los estanques que tenían agua empozada. La enfermedad era difícil de curar, no habían medicinas: no había penicilina ni otros productos para cortar infecciones y muchas personas morían, pero yo como era ruin tuve suerte y escapé. Me curé por inyecciones, algunas pastillas y un jarabe que tomaba encima de las comidas. Tardé mucho tiempo en recuperarme (un año más o menos) y cuando me levanté de la cama, no tenía fuerza en los pies y cuando empecé a caminar me sentí como un niño chico cuando empieza gatear.
Naira: ¿Qué equipos de fútbol eran más conocidos?
Tomás: Siempre fueron muy conocidos el Real Madrid y el Barcelona, creo que era el Real Madrid fue más que el Barcelona.
Naira: ¿Y el Tenerife como era por aquel entonces?
Tomás: Me acuerdo cuando subimos a primera con Javier Pérez, pero ha cambiado mucho en los últimos años, ahora bajó a segunda B y ya aunque quiera no puede ganar más puntos en los partidos que le quedan, así que ya baja a tercera.
Naira: ¿Cómo era tu colegio?
Tomás: Se llamaba Los Salesianos, era un colegio dirigido por curas. Se daban asignaturas como matemáticas, religión, historia, geografía, álgebra o lengua. La asignatura de música no estaba por aquel entonces, y los cursos eran de siete años de bachiller, después ibas al instituto y después a la carrera, no es como ahora que está la ESO y todo lo demás…
Naira: ¿Cuál era tu asignatura favorita?
Tomás: A mí me gustaba mucho Geografía e Historia, me gustaba saber dónde estaban los lagos, los ríos, y dónde se situaban los pueblos… Las matemáticas no se me daban muy bien y religión es lo que había antes pero no me gustaba mucho.
Naira: ¿Cómo era la enseñanza en Los Salesianos?
Tomás: Los curas eran severos, te ponían de rodillas con arenilla en las rodillas o con las manos abiertas y te ponían libros pesados y gruesos encima y te tenían así hasta que no aguantaras más, esos fueron los castigos que más usaban. Los curas eran muy duros.
Naira: ¿Y a ti te llegaron a castigar?
Tomás: Si, a mí también. Porque a veces hacia ruindades, le quitábamos los libros y lápices a otros compañeros y los poníamos en los pupitres, siempre se los cambiábamos de sitio. También hacíamos otras ruindades como ponerle un trapo o paño mojado dentro de pupitre (porque no tenían cerradura) y escapé hasta que alguno decía: “tal fulano me hizo esto…” y me trincaban.
Naira: ¿Qué tipo de programas daban por la televisión?
Tomás: La verdad es que no me acuerdo mucho, pero tu abuela sí que se acuerda del programa de la calabaza Ruperta, de un programa que se hizo muy famoso que se llamaba “Un, dos, tres...”. La televisión era en blanco y negro y habían muy pocos canales, me acuerdo del “noticiario español” y de Matías Prat (que era el padre del Matías Prat que está hoy en las noticias) que era un buen comentarista de deporte y noticias.
Naira: ¿Los coches eran buenos?
Tomás: No eran como hoy, sólo eran de cuatro velocidades y caminaban poco, no eran de mucha velocidad. Todo los que yo tuve eran de cuatro velocidades, antes tenían bugías y delcos y platinos que iba dentro del delco. Hoy, hay un sistema nuevo y eso ya no se usa, los motores fueron renovados y ahora se utiliza la inyección directa de la gasolina al motor.
Naira: ¿Recuerdas los primeros coches que había en la época?
Tomás: Estaban los Humber, los Ford y los Chevrolet que eran los que rodaban. Los Fiat ya vinieron posterior a éstos y los Citroën también, pero por aquella época había alguno.
Naira: ¿Cuál fue tu primer coche?
Tomás: Mi primer coche fue un Seat 850, era de tamaño pequeño y tenía dos 2 puertas. Y mi segundo coche fue un Opel, un modelo que le decíamos “manta 2000” que ya no existen.
Naira: ¿Cómo eran los salarios en general?
Tomás: Antes los sueldos eran muy pocos. En el primer trabajo que yo tuve cobraba 500 pesetas al mes, trabajaba en oficina de comercio como ayudante de contabilidad, era una comercio comestible y todos los meses iba a hacienda a Santa Cruz para entregar los partes de todo lo que se consumía: judías, azúcar, arroz, aceite… allí me lo sellaban y yo traía el resguardo. Después pasé a la trabajar como camionero de la Pepsi-Cola y pasé a cobrar 4000 pesetas y algo, es una gran diferencia comparado a el otro trabajo que había tenido, estuvo un montón de años con la empresa y después me jubilé.
Naira: ¿Qué te parece el sistema empresarial actual en comparación con el trabajo que realizaste en Pepsi-Cola?
Tomás: Antes era mucho mejor, algunas empresas hacían fiestas, los vecinos iban y la gente estaba más unida. Al principio en la Pepsi-Cola, los días de Reyes íbamos todos los trabajadores como sus familias y la empresa les dejaban un juguetito a los menudos, cada uno se iba con un regalo, a los niños les daban un tren, un balón, o un carrito… y a las niñas una cunita o una muñequita...
Naira: ¿Cómo era la policía?
Tomás: La guardia civil era cuerpo más serio y se le tenía mucho respeto. La policía nacional no existía y sólo estaba guardia civil y la policía del ayuntamiento que también la llamábamos como celadores o guardia municipal.
Naira: ¿Qué importancia se le daba a la religión?
Tomás: Estaba la religión católica, las protestantes no las conocíamos tanto, habían algunas pero muy pocas y como venían muchos turistas pues habían, pero nosotros optamos por la religión católica.
Naira: ¿Ibas muchas veces a la iglesia?
Tomás: Si, tu madre y tu tío iban a misa con nosotros todos los domingos. Y después siempre íbamos a Santa Cruz o San Andrés, con la madre de tu abuela para comer y pasar el rato.
Naira: ¿Qué tipo de actividades se disfrutaba en esos tiempos?
Tomás: Nosotros solíamos salir siempre a dar una vuelta, al principio no había ni televisión, ni radio y todas las noches íbamos al cine. En el Puerto había dos cines, el Olimpia y el Tófan, y ya no existen ninguno de los dos
Naira: ¿La mili siguió siendo obligatoria?
Tomás: Si, era obligado ir, el censo lo tenías que declarar a la guardia civil, cuando llegaba tu quinta (que era a los 21 años) estabas obligado a ir al servicio militar. Te destinaban según la letra del apellido, si tenías la letras “B” te mandaban para un sitio si tenías la “M” para otro…
Naira: ¿Cómo fue tu paso por la mili?, ¿Tuviste amistades allí?
Tomás: Yo fui como voluntario al cuartel, habían varias ofertas de tierra mar o aire, y podías hacer un curso de radio, medicina (ATS, no médico), electrónico, y yo decidí hacer el de ayudante especialista escribiente. Luego, me destinaron a Badajoz y estuve en una oficina que llamaban “oficina mayoría” que era el centro de la oficina.
Tuve algunas amistades cómo Cándido Meneses, Juan Padilla, Julián Rodríguez, fueron varias y buenas amistades, también Antonio Palacios. Todos eran voluntarios, todos los que estábamos éramos amigotes y habíamos hecho cursillos. Habían varios cursos; yo, por ejemplo, que hice el curso de escribiente me especialicé en filiaciones, cuando venían los reclutas que venían de expedición, yo me encargaba de pedirles los datos (los nombres de sus padres, si sabían leer y escribir, los años que tenían, a que se dedicaban, las cicatrices que tenían en el cuerpo, si se habían operado de algo o no…), los escribía a máquina de escribir y les hacía una ficha a cada uno. El historial duraba el tiempo que estaban en el ejército. Además de mi especialidad había otras como la de correspondencia, archivos y otros que se encargaban de llevar el correo, que se hacían mucho.
Naira: Bueno, gracias por haber contestado a mis preguntas. Me ha servido de mucho porque la muerte de Franco y la siguiente Transición fue una época que marcó mucho en la historia de España, y gracias a ti he conocido algunos aspectos que no conocía sobre el periodo y sobre tu vida.